lunes, 17 de marzo de 2014

Alexander

Aquel momento en su habitación con el calor subiendo cada vez mas primero a veinte, luego a veinticinco, las gotas de sudor empezaban a caer lentamente por la frente de Alexander, rápidamente sus recuerdos lo llevaron a un lugar que creía olvidado, un lugar de su infancia donde tuvo que vivir el horror de verse a si mismo transformado en un ser tan lleno de odio y rencor que no podía creérselo, un lugar donde la temperatura máxima por día era de treinta grados casi tan parecido como el de su habitación. Ese no era el problema en si, el problema realmente era que en el lugar donde vivía no podía llegar a esa temperatura a tan altas horas de la tarde.

Eran ya las 5:30 de la tarde cuando Alexander empezó a sentir ese calor, ese terrorífico y extraño calor equivalente a las llamas del inframundo, sus pensamientos eran cada vez mas vagos, se iba perdiendo en un mar de recuerdos vacíos y hostiles. Cada recuerdo, cada pensamiento cada visión lo hacia quedarse mas en el olvido, en aquel lugar pasaba por necesidades de hambruna, el y su madre decidieron ir para poder auxiliarlo...
pero la fortuna no estaba de su lado ya que el dinero que tenían no era suficiente como para poder sostenerse así fuera por un mes, de hecho el dinero al verlo de cierta manera en verdad no alcanzaba si no para unas tres semanas, luego de eso el hambre aparecería de nuevo y surgiría a la interrogante mas común entre todas las personas ¿Ahora que?
Tal cual como lo pensó así su madre se realizo, tres semanas despues ya no había dinero para comprar comida, estaban varados esperando la paga de su padre, paga la cual se veía tan lejano como el día final de cada año que empieza...
Los días pasaban el hambre aumentaba, las peleas no se hicieron esperar, gritos y gritos por parte de sus padres hicieron que Alexander se quedara el la parte trasera de la casa para escapar de aquellos gritos incesantes llenos de rencor palabrotas incluso de llantos de ira.

Fue en ese instante que Alexander recordó el primer impulso de poder, pero solo que al estar así de pequeño lo relaciono con un fenómeno de la naturaleza o de la física incluso, aunque no conociera mas del tema, entre la maleza del jardín trasero de aquella casa. Una casa de aspecto mas que tétrico fuese de día o de noche, sus paredes eran blancas, mas el tiempo, el sol y la poca agua que llega a este lugar a causa de las lluvias habían dejado ciertos parches negruzcos dando así un aspecto terrorífico digno de una película de horror, el techo de dicha casa era hecho en un material tan similar como el acero solo que al calentarse hacia un ruido muy peculiar "Tac" "Tac" "Tac" mismo sonido que se podía escuchar en las noches cuando bajaba la temperatura...
La entrada tenia unos muros con la misma forma que aquellas paredes blancas. Parecía mas que la casa en si estuviera abandonada, las ventanas con barrotes  pequeños y negros eran el ingrediente extra que la hacia mas terrorífica, pero para añadir algo mas sobre nuestra receta de horror puro. Ninguna ventana tenia cortinas, así que no era raro que las personas de afuera de llevaran un susto al hacia una de las ventanas ver un rostro de alguna persona para luego llevar una sorpresa al no ver a nadie, como si se tratase de algún ente o espíritu que vive en aquel lugar...

Tanto como en la entrada de la casa como en el patio trasero la hierba era reseca debido a las altas temperaturas. Ese no es un problema, el problema es que en estos lugares viven los escorpiones negros, que suelen ser mas venenosos que los que se encuentra en un desierto.
Alexander le daba puntapiés a unas piedras que veía sin darse cuenta que debajo de una de ellas se asomaba un escorpión. Alexander se dio la vuelta intentado hacer giros para distraer su mente de aquellos problemas matrimoniales, pero esto no da resultado. En cambio se queda pensando y cuestionándose como si se tratase de un adulto.
¿Por que debo pasar esto? ¿Acaso no es mi padre lo suficientemente grande como para aceptar sus responsabilidades? ¿Por que nos arrastro a este lugar?
Aquellos pensamientos lo llevaron a un estado catatónico, casi hipnótico, sus pupilas se dilataron, su boca era reseca, no sentía calor, era parte de aquel calor abrazador...
Miro hacia sus pies aquel escorpión venia tras el listo para depositar su veneno en su pie desnudo.

Alexander en aquel estado lo único que hizo fue actuar bajo su propio instinto, miro su mano y la puso en una posición como si quisiera tomar al escorpión a la distancia, mas esto no era lo que el deseaba, tenia la palma de su mano extendida y sus dedos separados. Luego como estuviera estrangulado a alguien con una sola mano cerro sus dedos, aquella persona imaginaria que tuviera su cuello en la mano de Alexander estaría sintiendo como su respiración se corta lentamente...
El escorpión de la nada se quedo quieto y dejo de moverse... Alexander rápidamente reacciono ya que madre la había llamado, el salio de allí corriendo sin  saber lo que había hecho...
Tras unas pocas horas Alexander volvió a su lugar de pensamientos, como ya lo solía llamar, vio al escorpión siendo devorado por las hormigas.
Fue en ese instante que los recuerdos de Alexander volvieron de un solo golpe dando aquella sensación de confusion como a la vez de seguridad al saber lo que había hecho, ahora entendía bien, la muerte de aquel escorpión no fue producida por el calor sofocante de ese día como lo había pensado, era el quien lo había hecho, era ese poder mágico o extraño, ese don o esa maldición la que había hecho ese trabajo.
Ahora conocía la verdad, mas hacia falta algo en el, un ingrediente extra que haría que su poder se desatara al 100% y eso era el odio. odio por ver la injusticia, odio por el ver el mal, la codicia de otras y mas que todo odio por como lo trataban...
Aquel amor despreciado le hizo abrir los ojos, pero no seria si no hasta unos años despues que Alexander haría su venganza maestra, algo tan trágico que seria recordado por todos como "El día mas oscuro"

VII

De el diario de Adriana:

Se que hice muchas cosas para que el actuara de ese modo, yo y todas aquellas personas que traicionamos su confianza y lo usamos bajo nuestros propios fines.
Es algo dificil de entender y se que ustedes no podrán hacerlo, por que ahora que lo pienso mejor incluso para mi es dificil de entender este tipo de situación...
Ver que una persona como el, tan noble y tan paciente, que no mataba  ni a una mosca fuera capaz de cometer tal acto tan horrible...
Pero esa es la verdad. Una horrible verdad.

La voz latente en la mente de alexander decía una y otra vez que debía hacer todo lo malo lo que su corazón le dijese, cada acto vil y bajo que existiera, pero lo único que podía conseguir era callar ese tipo de voces ya que su nobleza era única, tal vez ese era su punto de equilibrio pero ¿como saberlo? era dificil conocer lo que pensaba, tal vez es cierto lo que dice un viejo dicho "hasta el corazón mas noble se cansa de ser pisoteado o apuñalado"

Es una verdad infalible, dificil de comprender para muchos, pero cuando se es capaz de hacerlo, uno se da cuenta de su verdadero significado...
Pero así fue, Alexander inducido por su "voz buena" decidió dejar todo atrás... jamas sabremos si fue un error o no ya que aquella herida jamas se cerro, pese a que dicen que el tiempo cura todas las heridas del amor...

Su amor latente dejo muchos espacios vacíos en su mente, Alexander cada vez mas llegaba al fondo de su ser, creando para si mismo entes o disfraces con los cuales se sentía a gusto y podía ser el mismo... su personaje favorito o su personalidad favorita era la de "El Hombre Sin Rostro" un hombre con la cara totalmente cubierta de una mascara blanca, no dejaba ver sis ojos boca, nariz u otra parte de su rostro. el resto de su vestimenta era negra y tenia grandes cuchillas en sus brazos, al rededor de su cintura cuchillas inglesas del siglo XVIII y su lugar de caza. Las sombras...
Aquel personaje era todo lo que el quería hacer, salir de noche no dormir y castigar a quienes era necesario, ladrones, drogadictos, incluso personas que no tuviesen culpa de algo malo...
Digamos mas bien como un delito gigante, asi solo fueran aquellos chiquillos que caminan a altas horas de la noche buscando a quien asustar con sus navajas para robar un poco de dinero y seguir haciendo sus cosas.
Otro de aquellos personajes que lo inspiraba y que el mismo había creado era el ser perfecto del vampirismo...
quien llamo. "Murder" por su significado "Asesinato"  Este hombre al igual que "El Hombre Sin Rostro" era un ser nocturno, pero en vez de matar a las personas creaba su imperio vampirico haciéndolo mas grandes que los susodichos clanes vampiricos que existen en e mundo tales como el clan de los"Nosferatu" o el clan de los "Toreador" u otros muchos mas...
Para este ser su mundo perfecto era el mundo vampirico, con las reglas extremas, volviendo a las torturas del siglo XVII y XVIII. Reglas las cuales eran extremas frente a la traición y la desobediencia...

Tal vez Alexander no lo sabia, pero aquellos seres que había creado, no eran parte de una persona loca... No. Eran parte de si mismo, parte de su ser, aquella parte oscura que desea salir, pero que su mismo ser por razones de cultura, sociedad,  nobleza y demás no dejaba salir.
Mas el sabia que tarde o temprano los dominaría y eso lo supo en cuanto conoció a otra de aquellas personas que destruyo parte de ser...

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