miércoles, 2 de marzo de 2022

El sacerdote sin cabeza

La Bogotá noctámbula posee muchas historias, estás provienen de muchísimos años atrás. Y está, es una de esas historias.

En las noches de la colonia, cuando el basto silencio era testigo de seres oscuros y misteriosos. Entre aulllidos de perros, ojos brillantes de búhos y lechuzas y porque no, de la vigilancia de misteriosos felinos en los tejados capitalinos.
Muchos aseguraron ver a un sacerdote, uno particular... Uno el cuál no poseía cabeza.

La gente de la época aseguraron ver una figura espectral vestido de fraile caminando a la luz de la Luna llena. 
Otros aseguraron verlo con sombrero, tunicas doradas moradas o verdes. Colores de la época...
Éstos seguran que se le podía observar celebrando la misa de medía noche, acompañado por un monaguillo, una monja misteriosa y un sacristán. 
Todos quienes lo vieron aseguraron que éstos era. "muertos vivos" que poseen rostros y manos de calavera. Incluso que si escuchaban bien, podían escuchar a un coro salido del purgatorio.

Esté ser deambula por las calles de la antigua SantaFe asustando a la gente y oficiando misas pero ¿Por qué anda sin cabeza?
Se dice que este sacerdote fue maldecido por Dios al cometer sacrilegio teniendo relaciones sexuales con una mujer casada.

Otras versiones van desde que dicho sacerdote defendió las tribus indígenas, que debido a su traición a la corona española su castigo fue ser decapitado.
Que vendió su alma al diablo, para así cometer crímenes horribles.
Que fue decapitado por la santa inquisición.
Incluso que fue asesinado por robar vasos "sagrados" con los que se oficiaba los sacramentos...

Lo único cierto de esta historia capitalina es que, se ha visto al sacerdote sin cabeza deambular por las calles a altas horas de la noche asustando a quienes se cruzan por su camino.

miércoles, 30 de septiembre de 2020

El Oscurantismo De Carrie

Hospital de Pittsburgh 4 de Diciembre de 1973

Los gritos de una mujer en la sala de maternidad retumbaban en las paredes del todo el lugar, aquellos gritos de  dolor puro, ese dolor que es la equivalencia de romper cada uno de los huesos, si hablo del dolor que solo puede soportar una madre al momento de nacer un hijo, una hija o Dios sabe que.
Ese dolor que aquel día tuvo que soportar Amelia Anson al dar a luz a su pequeña hija Carrie Anson.
Su padre Eric Engels no puede ocultar su felicidad, la sonrisa que en él es se desbordaba y dejaba salir aquella sonrisa innegable. Una emoción la cual no se puede explicar al ver a una pequeña sana y salva, una pequeña que vino a este mundo para sin dudas ser alguien grande.

De eso no cabrían dudas Carrie Anson  seria recordad y muy bien recordada.
En aquellos tiempos no era algo fácil criar hijos, pero sin duda resultaba más fácil que hacerlo ahora, ya que en estos tiempos a la gente le importa más las cosas físicas que las cosas espirituales, de eso no cabía duda alguna, para aquellas épocas el simple hecho de ver algún comportamiento extraño en tu hijo o hija, era algo de qué preocuparse.
Eso lo vivieron los Anson al ver que su hija crecía con algo extraño, no sabían que podría ser, pero su aura, su energía, era bastante extraña. Desde que nació, hasta donde ellos pudieron contar su historia, notaron que Carrie no estaba bien...

Nota de Amelia Anson 4 de Diciembre de 1974

"Sabrá Dios por lo que estoy pasando, ha pasado tan solo un año y las cosas no están bien en mi casa.
Carrie casi no come, casi no se mueve, ¡Por Dios casi ni llora! Esto es extraño, no ha empezado a hablar o  a caminar, pero ya actúa de forma extraña, esto se sale de mis manos no se que tanto pueda soportar si esto no cambia, mi esposo no cree en este tipo de cosas, dice que mejorara. Yo solo puedo escribir esto, es la única forma que tengo para poderme desahogar"
"Me estoy volviendo loca ¿Que le pasara a mi pequeña?"

Nota de Amelia Anson 4 de Diciembre de 1980

"Hoy es el cumpleaños de mi hija, los años han pasado de una manera tan grande que no puedo creerlo, su situación no ha mejorado, incluso ahora estoy más preocupada. Aun no puedo borrar de mi cabeza aquella imagen que vi ese 24 de Octubre de 1978 cuando ella tan solo tenía 5 años de edad"
"Un día normal en el parque, Carrie ya sabía caminar y lo hacía bastante bien, como todo niño o niña sonreía por muchas cosas, era agradable verla así esa bella sonrisa con sus dientecitos pequeños sus ojos azules como el cielo y su cabello corto y castaño, ese día nada me prepararía para ver aquel suceso. Nada parecía fuera de lo común, nada, ni una sola pista...
El perro de los Godfind aquel Bulldog Ingles. Lo había visto varias veces incluso lo saque a pasear en dos ocasiones, era una mascota tierna y mimada como todos los perros de esta raza. No podría matar ni a una mosca, no sé que pudo pasar, cuando vio a Carrie se puso como loco. Sus ladridos estallaban como sonidos de bombas a la distancia, se le podía ver la saliva caer mientras ladraba. Pero no olvido su mirada, su mirada que siempre fue la de un perro noble esta vez tenía un aire no de odio si no de extrañeza, como si jamás hubiese visto una persona así, Era algo bastante extraño, creí que no le gustaban los niños o algo similar.
Criss Godfind un joven de tan solo 14 años de edad estaba con él, sostenía la cadena de "Lucky" recuerdo su nombre, sobre todo por su significado la "suerte" eso se debe a que casi muere en un accidente cuando era cachorro el padre de Criss, Johs Godfind lo rescato y lo curo. De ahí su nombre, Lucky jalaba y jalaba su cadena alzándose en dos patas Carrie solo se detuvo a mirarlo, recuerdo que todo esto paso en no menos de tres minutos, pero parecieron eternos...
En un momento la cadena de Lucky se soltó, no sé de qué manera. Solo podía escuchar la voz de su amo Criss gritando a todo pulmón ¡No Lucky! ¡No! pero el can no se inmuto por un instante ni se tomo la molestia de detenerse aunque fuera un poco, ese instante de pavor que recorría mi pecho mientras bajaba para proteger a mi hija, ocurrió, ese momento trágico, ese momento inexplicable, ese momento único e irrepetible.
Lucky salió despavorido por un lado de mi hija, Carrie solo lo miro no se asusto, no se movió del lugar este pobre perro fue empujado de tal manera que fue como ver a un jugador de futbol americano ser derribado por alguien más fuerte. El perro voló casi 5 metros de distancia, tanto como Criss como yo no podíamos creer lo que veíamos. El perro no murió, pero jamás volvió a acercase a nuestra casa o a pasar frente a ella, cada vez que lo hace se tira al suelo, llora y tiembla como un niño pequeño que le teme a la oscuridad."

Los sucesos de ese día de ese 4 de Diciembre pasaron con normalidad, así fue durante gran parte de su vida, mas Carrie seguía en aquel estado catatónico, pero si algo sabemos del destino es que es impredecible, en su niñez fue extraña pero al cumplir diez años esos sucesos que tanto hacían padecer a su madre habían desaparecido, mas Amelia sabia que algo extraño ocurría.
Por otra parte su padre Eric tenía un extraño presentimiento extraño, algo fuera de lo normal, estaba como su hija antes, pero como ese cambio aquel presentimiento se hizo fuerte. No sabía que pensar, no sabía cómo actuar.

Nota de Eric Engels 14 de Marzo 1983

"No se algo extraño pasa, mi mente no deja de dar tumbos, las ideas son como golpeteos de fantasmas al buscar ayuda o simplemente llamar la atención, algo extraño pasa y sé que todo apunta a mi hija Carrie, no se por qué antes no lo sentía, pero ahora lo veo, todos esos recuerdo pasan por mi mente como una vieja película. aquellos sucesos que mi esposa me contaba y yo no le creía, ahora sé que no es porque no le creyera, si no porque no quería ver, tenía un velo en mis ojos, ese velo oscuro como la noche sin estrellas se ha caído ahora veo la luz como los rayos de sol del verano. Puedo recordarlo todo desde el incidente con los Godfind, hasta lo que paso en la fiesta de cumpleaños. De hace tres años"
"El día pasaba normalmente, los adultos estábamos en el patio trasero de la casa mientras los niños se divertían en la piscina provisional que había comprado para la ocasión. Carrie estaba sentada cerca de ella viendo como los demás niños jugaban "Marco, Polo" entre carcajadas, el humo de la parrilla, las gotas que caían de aquella piscina de goma, las cervezas y las miradas distraídas, pude verlo, los ojos de Carrie, aquellos ojos azules que miraban el vació profundo simulando pensar en las maravillas del cosmos.
Aquella mirada fría y hostil, se posaron en el agua no se distrajeron en todo el momento,  ni un solo instante, cuando pude reaccionar pude ver el horror y escuchar los gritos de los niños. El agua se había tornado roja como la sangre, todos los niños gritaron y salieron de allí lo más rápido que pudieron, todo fue un caos en esos momentos, los pensamientos se afloraron como una nube de gas venenoso, muchos pensaron lo peor, muchos pensaron que alguno de sus hijos había sufrido un accidente. Tras ver que nada pasaba los ruidos cesaron, todos me miraban como si yo hubiese tenido algo que ver en todo esto, muchos pensaron que había derramado un químico alerta de orina para las piscinas, los cuales usualmente hacen cambiar de color el agua para hacer pasar una gran vergüenza a quien hiciera sus males en estos lugares públicos.
Pero no fue así, jamás haría algo así y menos si se tratan de niños, no pude explicar lo que paso, no pude pensar en algo mas si no en Carrie, Carrie Anson quien seguían en el mismo lugar mirando el agua de la misma manera de la misma forma, sin parpadear, sin hacer gestos, sin hacer nada."

Amelia y su esposo Eric ya había visto lo suficiente, sabían que algo extraño pasaba la pregunta era ¿Qué? decidieron buscar explicación a este suceso, sacerdotes, curas, monjes, excéntricos, toda aquella persona estudiada o no estudiada que pudieran brindarle información de lo sucedido en estas dos ocasiones pasaron por su casa, mas el misterio no de develado. No lo fue hasta que el mismo Eric fue quien dio la respuesta sin pensarlo...
Las situación no estaba bien en aquella casa, Amelia había empezado a beber, no sabía la razón exacta, era como si estuviera influenciada por algo o por alguien, "debería estar feliz" pensaba Eric, mas eso no era así, estaba hundida en una fuerte depresión, aquella depresivo que te ataca como aquel único pensamiento que se desborda por tu mente dando un aire de suicidio, era algo tan similar como vivir en infernó en vida.
Mientras Eric miraba un viejo álbum de fotos en su época estudiantil. mientras pasaba las fotos una de ellas cayó al suelo dejando ver aquella imagen tan clara como el día en que fue tomada, era él y su esposa, ambos estudiaban en la misma universidad, ese día se habían conocido, había sido amor a primera vista, pero aquel día que fue maravilloso ocultaba un suceso extraño y perturbador.

"Aquel año Eric tenía una novia su nombre era Sahara Frattini. Aquella mujer decía ser descendiente de una familia gitana, mas Eric no le prestaba atención a ello, solo le interesaba sus curvas, su cuerpo esbelto y los rumores que en ella rondaba. Rumores machistas y sexuales que la mayoría suele tener en sus años mas jóvenes que iban desde que era capaz de hacerte eyacular con solo tocarte o con su boca mientras te hace algo de sexo oral, hasta que sabia como complacer a un hombre con todas las posiciones del "Kamasutra" Así que Eric solo deseaba una cosa...
Pero como ante lo mencione el destino es incierto, aquella mujer no solo lo dejo con su pequeño amigo listo para la guerra que jamás existió, sino que también tras cinco meses de relación lograba hacerlo dormir, con tan solo abrir su boca, era la equivalencia de hablar con un refrigerador o un tostador. Así su mirada salto a Amelia, más esto no le agrado a Sahara.
El día en que se conocieron Sahara se fue de la vida de Eric no sin antes desearle lo malo lanzado unas palabras al aire, palabras las cuales el no recuerda,  Sahara lo amaba, pero al ver esto se había dando cuenta que era como todos los hombres o por lo menos en su gran mayoría, solo buscan un par de piernas abiertas..."
Tras descubrir una pista demasiado importante decide salir en busca de esta mujer, ella le daría una explicación de todo lo que pasaba y si era así la convencería para levantar la maldición y hacer una familia. Su búsqueda no sería fácil, pero con algo de suerte lo conseguirían. La historia de lo que había pasado llega a oídos de Amelia quien decide no dejar a su esposo solo y menos con alguien como ella, si las cosas eran así el podría correr algún tipo de riesgo. Mas las cosas no serian fáciles, los caminos de los gitanos son difíciles de encontrar.
Tanto fue así que pasaron tres largos años más hasta que pudieran hallar una pista de su paradero.
Carrie para aquella época ya tenía 14 años de edad. Carrie ya no iba a la escuela, las cosas se salían de control cuando ella estaba cerca, cosas extrañas pasaban, ella deseaba ser sociable, mas todos le tenían no miedo si no pavor. No querían tan siquiera mirarla, reportes estudiantiles aseguro que uno de los alumnos que molestaba a Carrie con una simple broma tuvo que ser hospitalizado. La causa una pierna rota...
El director de la escuela Patrick Byrne fue quien la expulso ya que vio todo lo que había sucedido.

Reporte Patrick Byrne 25 de Abril de 1987

"Cuando desperté esta mañana sabía que no iba a ser un día común y corriente, tenía un vago presentimiento en mi mente, ese mismo presentimiento que sientes que algo se te olvido, que algo pasaste por alto.
Cuando estaba llegando a la escuela ese presentimiento se hizo mucho más fuerte, era tan extraño, todo estaba fuera de su lugar jamás me había sentido así, el resto del día la pase en mi oficina tratando de callar ese sentimiento extraño, revise documentos. Revise las listas de alumnos y en una de ellas la vi. Allí estaba Carrie Anson con sus ojos azules cabello castaño, y sonrisa perfecta. Me dio curiosidad era como ver a dos personas en un solo cuerpo, en ese instante el ruido del pasillo me pareció inusual pese a que todos los días lo escuchaba cuando era la hora de salida de todos esos jóvenes, pero este tenía algo extraño, tenía un aire de burla y de melancolía. Al momento de salir pude ver una nube de alumnos que reían, pero no era una risa amistosa si no una risa cruel me abrí paso delante de todos los alumnos un muchacho de nombre Kevinn Mcload se burlaba y apuntaba con el dedo, al frente tenia  a Carrie, Carrie Anson, quien miraba a su alrededor desorientada de lo que pasa, estaba confundida ¿Por qué se reían de ella? tras darse la vuelta pudo observar una nota pegada en su espalda el cual recitaba un mensaje nada agradable decía "Inserte su pene aquí" con una flecha indicando a su trasero cuando salí tras ella las risas se agotaron más de un alumno se fue por temor a ser expulsado del plantel, tome el cartel que tenia Carrie en su espalda, la ira me invadió por obvias razones, mis gritos retumbaron en todas las paredes, los rostros de los alumnos de esas risas crueles se transformaron en un miedo excesivo, mas nadie respondió Kevinn me miraba fijamente mas él no podía ocultar su risa malévola, por simple lógica podía decir que fue él, mas no estaba 100% seguro.
Tras mirar a Carrie, le pregunte ¿Quien hizo esto? ¿Lo sabes? ella negó con la cabeza, su miraba estaba baja, prácticamente estaba a punto de llorar, alzo su mirada dijo que Kevinn le había tocado al espalda, era el único que recordaba, mas ella no sabía por qué. Mi error tal vez fue que deje ver el cartel tras de mis manos, Carrie lo vio mientras yo reprendía al señor Mcload en ese pequeño fragmento de ira y desconcierto Kevinn miro detrás de mí, sus ojos los recuerdo bien se abrieron de una menara abrupta y fuerte como si hubiera visto un fantasma, al voltear pude ver a Carrie sus ojos estaban rojos por las lagrimas que estaban a punto de caer, mas no fue solo eso estaban inyectados de una ira incontrolable, su cabello parecía moverse por su misma voluntad y no por las ráfagas de viendo que entraban por las ventanas abiertas. De pronto una de estas ráfagas tan  fuerte que desprendió uno de los extinguidores que estaban sobre la paread hizo volar al señor Mcload por los aires como si se tratase de un pedazo de papel atrapado bajo la corriente celestial. 
Un golpe seco se escucho tras un sonido particular, un sonido de una rama rompiéndose, mas esto no era una rama, era la pierna del señor Kevinn Mcload que se había roto al caer al suelo. Aquel golpe contra la pared lo dejo inconsciente, al caer como un saco de patatas cayo con todo el peso de su cuerpo haciendo que su pierna se rompiera, según el dictamen del médico se rompió en tres partes diferentes, que tendría que usar muletas durante el resto de sus días"
Después de este desafortunado incidente Carrie debía estar en casa y sus padres debían pagar sus estudios personales. Pero al ver esto decidieron salir a si fuera a ciegas a buscar a esta mujer, no importaba nada mas solo dejar a un lado todas esas cosas malas que pasaban en sus vidas. Pero tras escuchar la noticia Carrie pide una explicación a lo que estaba pasando, sus padres deciden contar lo que paso. Aquella noticia no causo un agrado en ella, y no era para mas, sus ojos estaban llenos de lagrimas y por más que rogó, por más que suplico para poder ir con ellos sus padres lo negaron, era mejor que se quedara decían ellos.
Desafortunados eran sus destinos al no saber a lo que se encaminaba.
Sus padres tomarían el siguiente vuelo a España ya que en ese lugar era donde se encontraba Sahara. Al caer la noche ellos estaban abordando su avión mientras Carrie lloraba en su casa mostrando una faceta jamás vista, ese llanto se transforma en un terrible vació y por primera vez pudo sentir aquel poder recorrer su mente y su cuerpo, aquel poder la estremeció la hizo perder lo poco que le quedaba de razón, lo siguiente que vio fue una premonición, el avión donde estaban sus padres caería...
Aquella visión horrorosa hizo caer a Carrie de su cama no podía creer lo que había visto, no podía creer aquel suceso extraño que se había formado en su mente como la peor película de horror. Corrió a la sala de su casa ya que sabía que si algo pasaba lo darían en las noticias locales o internacionales.
La espera se hizo eterna, por más que cambiaba los canales de su televisión y los diales de la radio no captaban nada, por un instante se calmo, pensó que nada de eso podría ser real....

En ese mismo instante el sonido abrupto de las noticias locales retumbaba en su cabeza como la más cruel de las sinfonías, el presentador de las noticias nocturnas, un hombre de cabello rubio y ojos verdes claros, un traje azul oscuro, camisa blanca y gafas muy delgadas narraba los hechos que a Carrie Anson le causarían el mayor horror, la mayor tristeza, la mayor soledad que alguna persona hubiese podido imaginar o sentir en toda su vida

"El vuelo 732  de American Airlines con destino a España sufrió un accidente, los primeros reportes dicen que hubo un problema en las turbinas, aparte de un problema de turbulencia, hizo que la aeronave con más de 60 pasajeros..."
La voz del presentador se hizo cada más lejana, Carrie no podía creerlo era verdad lo que había visto, lo había visto todo, pero no fue lo que ocurrió realmente.
En su mente podía verlo todo, la turbina principal del avión había sufrido un fallo en el sistema de ventilación haciendo que las hojas no pudieran girar de manera rápida y eficaz, aparte de ellos el cableado del sistema no mostraba algún tipo de daño lo que hizo que al momento de la turbulencia las aspas de la turbina se detuviera, así fue como el avión donde iban sus padres se desplomo.
El tiempo paso, Carrie crecía aun mas con el dolor de su mente tratando de buscar las respuestas que le pudieren liberar de aquella maldición, sus caminos se hacen estrechos el dinero se agotaba aun era joven para poder trabajar y lo poco que había dejado sus padres ya muertos no duraría por siempre. Tanto como su vida como su hogar vació jamás será el mismo de nuevo.
Con el dolor de su alma y con las dudas en su mente y alma, decide irse y empezar de cero una nueva vida. Mientras busca la respuesta de su terrible maldición....




Tres años más tarde...
13 de Mayo de 1990...
¿Cariño has visto mis documentos?
Las palabras de una persona mayor su voz era más madura, se nota que la experiencia de la vida ha sido más que suficiente para mantenerla vida y saber  que es la vida.
Carrie ya con una edad de 17 años y una larga historia a través de los años que paso como trotamundos al buscar las respuestas de su maldición, se estableció en Texas donde encontró un lugar donde quedarse y empezar su nueva vida confiando en que nada malo sucediera. Aunque eso no había pasado desde el día en que habían muerto sus padres, más eso no implicaba que ella dejara de buscar lo que su mente y corazón anhelaba "Una respuesta"

Si mi vida está dentro del archivador del sótano.
Aquella voz masculina, fuerte pero a la vez delicada, era de voz de su prometido Anthony, un hombre que tenía 21 años de edad, de cabello oscuro y ojos claros, trabajaba en una constructora cercana, había conocido a Carrie mientras ella caminaba buscando un lugar para quedarse unos días. Había pasado ya dos años de aquel entonces, estaban a punto de celebrar ese romanticismo, con una cena a la luz de las velas, unas copas de vino. En resumen este hombre había planeado toda una noche de pasión y amor junto a esta hermosa mujer.
Pero no todo lo que brilla es oro y si algo debemos tener en cuenta de toda relación es que la confianza es la piedra angular para que todo funcione, en este caso los secretos de Carrie eran lo que a Anthony no le gustaban y pese a que él quería saberlo Carrie en el fondo sabía que no le creería y todo se terminaría, eso sería lo último que ella desearía para su vida llena de problemas y líos...

"Pero cuando alimentas una ilusión durante tanto tiempo, al final una persona terminara lastimada, ese sentimiento solo lo podemos conocer quien ha caminado bajo las sombras toda la vida." (n.t)
Mas esos deseos quedarían allí en simples deseos que su mente no podría controlar, ese día en particular el 15 de mayo de ese año el día en que Carrie llegaría  a los brazos de su amado, su mente esta mas distraída que nunca, caminando por la calle había encontrado la posible respuesta para su maldición, una mujer, una mujer llamada Janeth Rust una psicóloga algo mas "Liberal" si podemos decirlo de esa manera, había escuchado el caso de Carrie dándole un poco de esperanza la ayudaría a buscar las respuestas a través de su subconsciente, sesiones de espiritismo y demás.
Carrie estaba más feliz que nunca, tanto fue así que olvido aquel compromiso con su prometido, Anthony por su parte estaba ya sentado frente a la luz de las velas tomando una botella de "Sauvignon Blanc" En sus ojos se veía el amor sembrado en aquella mujer que un día al caminar por las calles con su mirada distraída y llena de dolor pero con la sonrisa de mil ángeles decidió amar para toda su vida, y esa promesa la cumpliría, ya que su vida no sería tan larga después de esa noche.

Pasaron varias horas este hombre no pudo esperar más pago lo que bebió y simplemente se fue, tenia licor, dudas, inseguridad, pero más que todo desilusión, una desilusión que se convertiría en melancolía, sentía que su vida se desmoronaba como la arena en el aire, pero la noche era joven, Anthony entro a una taberna donde sus ojos se posaron sobre una mujer su nombre era Jaqueline una mujer hermosa de cabello rubio ondulado, vestido rojo y ojos de color azul, el la miro por un instante aquella mujer con una mirada sensual se acerco a él, una voz suave y melodiosa se calvo en lo más profundo de su mente, así hablaron durante unos minutos.
Carrie por su parte después de unas horas y con un pensamiento tan fuerte como lo que ocurría durante su niñez recordó su compromiso, su mente salto de la fantasía a la realidad, salió corriendo en busca de esa persona que le tendió la mano cuando estaba perdida, pero al llegar al lugar de la cita...
Su mesa estaba con otras personas, pregunto a varios dependientes del lugar quienes le dijeron que aquel hombre se había bebido una botella de vino muy costosa y se había ido.
La depresión la invadió no podía creer que le estaba pasando eso, decidió caminar, tal vez lo encontraría en algún sitio cercano, camino por diferentes lugares y un impulso que provenía de su cabeza la hizo caminar hacia el bar donde estaba su prometido. Tras mirar por la ventana desde el otro extremo de la calle, la desilusión fue extrema, aquella mujer rubia de ojos azules estaba riendo con el tomando sus manos, como muchos debemos saber los celos son mas invasivos que cualquier virus, una vez entra es difícil que salga.
Carrie con las lagrimas en sus ojos y recodando toda la desilusión de su vida salió corriendo a su casa, pensaba en sus padres, en su vida, en su viaje, recordó todo lo que paso....

1988
"Camino entre las sombras recordando la muerte de mis padres !Oh Dios como los extraño, como extraño mi hogar¡ los caminos son difíciles de andar si no tienes un lugar, comer lo que puedas en la calle o buscar entre la basura cuando no tienes dinero, ser empleada de aseo, ser recicladora, incluso ser prostituta, aquellos pensamientos invadían mi mente y aunque tuve que hacer muchas cosas de las que pensé, jamás creí que podría tocar fondo, no fue sino tan solo aquella ocasión de 1988 cuando estaba a la falda de un árbol, esa noche estaba lloviendo, mis ojos estaban llenos de lagrimas quería dejar todo atrás. No tenía dinero, no tenia familiares y si los tuviera no podría ir con ellos, porque temo que les pase lo mismo que a mis padres.
Un hombre en su automóvil se acerco a mí, sus ojos parecían demostrar amabilidad, pero no era así, aquel hombre solo deseaba una cosa y me di cuenta muy tarde.
Recibí su ayuda por que en verdad estaba desesperada, mas no por que lo deseara. Aquel hombre alto calvo y un poco gordo volvía de su trabajo, dijo que trabajaba en un edificio de seguros del estado, no se que tanto seria cierto, al llegar a su casa me senté en el sillón el amablemente me ofreció toda su casa, dijo que podía usar lo que quisiera. Decidí darme un baño, estaba cansada quería meditar un poco...
En el instante en que salí este hombre estaba desnudo, el horror me invadió. Sus ojos mostraban la perversión, su sonrisa era terrorífica llena de un deseo sexual, rápidamente su pene estaba erecto, me aferre a mi toalla intente dar un paso atrás pero estaba cerca a la puerta, el piso estaba mojado, cuando él se aproximo, salí corriendo pero mi suerte fue otra, resbale y caí. Este hombre me tomo del abdomen, me levanto como si yo fuera un simple muñeco, me llevo a la sala donde estaban mis cosas allí paso lo que jamás creí pasar en mi vida..."

"Después de ese terrible suceso, aprendí una valiosa lección, la vida es cruel, por lo tanto no debemos fiarnos de nadie, ni de nada. Esa sería una lección que tengo presente y la tendré toda mi vida..." 
El resto del largo viaje de Carrie por los diferentes estados de los Estados Unidos estuvo llenos de experiencias únicas. Hasta poder llegar a su destino final Texas, lo último que supo de su recorrido de este viaje fue ver por el periódico la muerte este hombre que no resulto trabajar en el seguro del estado si no por el contrario era el socio mayorista de una empresa en crecimiento...
Había muerto por circunstancias desconocidas, solo nombraba el periódico que lo habían encontrado muerto en la tina de su casa...
Luego de eso, la vida había cambiado con la llegada de Anthony, pero ahora todo parecía muy diferente su mundo se caía por pedazos, al llegar a su casa deseo morir, pensaba muy seguido en aquella palabra que  a muchos perturba y deja la sangre helada "Suicidio" esa palabra era mágica al escucharla en su mente, deseaba suicidarse, dejar todo eso atrás, pero había algo, un apego no material, estaba segura que podría tener una vida "Normal" y dejar en el paso todo malo recuerdo, sabía que podría hacerlo ahora tenía la ayuda de Janeth, peor lo que pasaría esa noche seria la gota que rebosaría el vaso de la cordura y la razón...

Algo en su mente le dice que debe salir a buscar a Anthony, su desespero se hace grande, antes de salir mientras busca sus llaves y su bolso, justo en ese instante, Anthony sale del bar totalmente solo, su acompañante no está. Su largo viaje comienza sin un rumbo fijo, la luna llena posada sobre el observando como la guardiana de los caminos. La noche se hace cada vez más fría Mas oscura y más reducida, no hay mas caminos Anthony mira un puente aquel puente extenso, oscuro, en si macabro, era un excelente lugar para poder pensar, camina sin algún pensamiento en su mente la mirada vacía, los hombros caídos. Como si se tratara de un muerto viviente con la única diferencia es que no tenía sangre en su ropa o estuviese rota.
Carrie sale de su casa, los pies avanzan, las manos sudan, los ojos se mueven rápido, las luces e hace cada vez más intensas, más que por otro lado ya no hay mas luces, los pies son lentos y se arrastran por la grava del suelo y no sudan las manos, están frías como el beso de la muerte.
Tras llegar al bar Carrie busca entre la gente a su amado Anthony, mas  no hay nadie, su pensamiento se enmarco en un rancio recuerdo referente a su violación...
¿Se habrá ido con ella? ¿Estarán teniendo sexo ahora mismo? No, no Anthony, el era de los buenos hombres que casi no existen que respetan una relación.
¿Pero? ¿Donde está? camina adentrándose más al bar, el cantinero la mira con ojos nervios, tal vez era un prostituta buscando pelea por su territorio pensó el hombre, Carrie voltea a verlo, el viejo tabernero con una barba larga y blanca, un estómago bastante grande, una camisa de cuadros roja  y tirantes azules, le pregunta si a visto a su esposo. Su descripción es lo más minuciosa posible, mas el tabernero pensando en si lo había visto o no cabila en su mente impulsando los ojos hacia el techo de la taberna. Taberna cuyo nombre era algo gracioso como para saber si era o no un chiste "El Gato Con Botas" el dueño de aquel entonces le había puesto ese nombre ya que lo apodaban "El Gato" lo curioso es que siempre estaba vestido con vaqueros azules desteñidos y botas de vaquero, así fue dado el nombre de ese lugar, el hombre asiente algo dudoso de, ya que su edad no le abada ya para poder recordar todas las personas que a ese lugar llegaban. Pero la descripción del hombre pese a lo confusa era más que fácil recordar, pero Carrie le da la descripción de la mujer que lo acompañaba, seria más fácil, efectivamente eso paso fue, era la única mujer con esa descripción y la única mujer del bar por no decir mas...

Aquella mujer había salido antes  fumar un cigarrillo, este hombre salió casi enseguida mas la mujer entro sola, vio que no había nadie y se fue, eso era todo lo que había pasado en cuento el camino que tomo aquel hombre era desconocido...
Esas palabras había helado la sangre de Carrie, era mil veces mejor estuviera con la mujer y no que estuviese solo en medio de la nada, su preocupación se hizo enorme al pensar en donde podría estar. Por otro lado Anthony seguía caminando a su fatal destino, al caminar mas y mas frente a ese puente, su primer pensamiento fue de lanzarse al vació, mas eso no fue así por el contrario lo más extraño que pudo percibir sus ojos fue una extraña luz, aquella luz cegadora avanzaba hacia el ¿un automóvil? ¿Un camión? ¿A esas horas? no, no era anda de eso...
Aquella luz lo envolvió como si se tratase de una sabana puesta encima de un cadáver, una visión bastante cruel para su futuro, eso le pasaría al joven Anthony seria cubierta con una sabana tal cual como pasaba con esa extraña luz...

Carrie desesperada corría por cada lugar por cada rincón, no tuvo más remedio que correr a la comisaria y reportar su caso. Pero como bien se sabe para dar a una persona como desaparecida deben pasar mínimo 48 horas... algo bastante cruel y despiadado sobre todo en este tipo de casos y en un lugar tan pequeño como lo era Emhouse, mas a Carrie no le importo ello, sabía que sería algo imposible de que pasara pero tenía la esperanza de que pudiesen buscar a su amado, poderlo encontrar para así calmar aquella voz interna que decía que algo malo estaba por suceder...
Al pasar las puertas de aquella pequeña comisaria un hombre blanco de camisa color abano sombrero del mismo color y su emblema de la policía de Texas, miro a Carrie quien su rostro no podía disimular el miedo reflejado en sus ojos, aquel hombre llamado Mark sabe que algo muy grave pasa se levanta de manera ágil y veloz, cree que podría ser algún asaltante o algo peor, su voz una voz fuerte ruda y muy segura de sí misma pregunta que era lo que estaba pasando, Carrie casi sin palabras puede decir unas palabras Mark intenta calmarla, su voz se hace más clara y ruega a este hombre que salgan a buscarlo.
Mark sabía que no podía hacer nada de manera legal antes de 48 horas, lo único que podría hacer era enviar a un par de oficiales a patrullar, si veían algo extraño debían informarlo de manera inmediata, Carrie estaba sentada donde lo haría cualquier persona detenida, el oficial Mark le ofrece un poco de agua, pareciera que fuese a morir de miedo en ese lugar, el pide a Carrie que le cuente lo que pasó, lógicamente ella no contaría lo de sus poderes pero si lo que pasó en su relación, la historia fue así contada.
Mark se siente un poco mal por la pobre chica y deseaba que obtuviera noticias buenas, mas eso no pasaría esa noche ni las siguientes...

La patrulla estaba a las afueras de Emhouse cuando la luz de la camioneta, una Dodge del 75 vio un cuerpo en el suelo, este cuerpo era el de Anthony, la patrulla avisa a la comisaría donde Carrie escucharía la descripción de este hombre, sabia de inmediato que era Anthony...
¿Que paso? la voz de Mark rompe el silencio de la triste mente de Carrie. Los oficiales explican que no hay muestras de agresión o de golpes, ni hay tan siquiera un rastro de sangre, a lo cual Carrie en su mente lo ve vio todo lo que había pasado.
Vio la luz, vio el dolor de Anthony vio como su amado moría de un colapso nervioso al no saber que era aquella luz, la hiperventilación de los pulmones lo había hecho alucinar rápidamente había perdido en conocimiento y así su corazón dejo de latir...
 El oficial Mark ordena  a sus hombres hacer las investigaciones en ese mismo instante, envía más personas al lugar de los hechos, tras hacer esto mira a Carrie quien sigue en su estado de catatonia sumergida en su mente, sabía que lo había vuelto a hacer había matado a un ser querido y menos tiempo que antes, debía de tener toda esa locura, su único escape es Janeth, reacciona solo porque Mark la toma de su hombro, con su voz fuerte le dice que lo siente, ella decide irse a su casa, por simple lógica el oficial no la detendría sin hacerle algunas preguntas, sabía que ella no lo había hecho o no por lo menos de forma física...
Pasan así tres días más, luego del funeral Janeth observa a Carrie, era la hora de enfrentar a su demonio.
En el cuarto día Carrie y Janeth están en su consultorio, un lugar lleno de libros, la mayoría de psicología, los otros de auto control, superación personal y unos muy pocos de religión.
El diván era enorme de color vino, un tapete de lana, y al otro extremo del la silla de Janeth una clásica silla del siglo XIV muy bien cuidado.
No creía que tendría que volver a ese lugar pero así debía ser, así debía callar las voces de su interior, así debía librearse de aquella maldad hereditaria....

En El Consultorio De Janeth...

11:50 Am

La primera sesión, ese preciso día, de luto por el amor de su vida, por su amado Anthony.
Carrie estaba lista para hacerlo, estaba dispuesta a enfrentar sus demonios,  estaba dispuesta a ser libre de aquellas ataduras mentales y espirituales o fantasmales, cualquiera que sea el caso, pero en esos instantes Carrie podía ver la libertad casi saborearla...
Sentada esperando que su única ayuda llegase a su consultorio, sentada en el diván su mente empieza a dar pequeños saltos, su mente empieza a ver  fragmentos de su vida, aquellos fragmentos era como los de una película, solo en este caso era su vida la pasa por su mente, aquellos fragmentos extraños le develaban ante sus ojos, aquellos suceso de toda su vida, desde que puede recordar, su mente la lleva  hasta cuando era niña y estaba en la piscina, incluso cuando estaba en la primaria, recordó detalles mórbidos de aquellos días y de el por que nadie se le acercaba. Aquellos recuerdos sombríos, de ver en su cabeza como cada uno de los niños que la lastimaban terminaban muertos de maneras trágicas y muy extrañas.
El caso de Christine Malcoby, murió ahogada en su tina sin motivo alguno simplemente apareció allí.
Pero dos días antes mientras la maestra Harris no estaba en aula de clases Christine hizo una bola de papel, llamo a Carrie y se la lanzo en la cara. Al pasar esto y era lógico de esperar a los niños les causo mucha gracia, lo cual hizo que Carrie se sintiera mal y empezara a llorar....
Un grave error ya que sería victima de ese bullying minúsculo para nosotros, pero extremo para una niña de tan corta edad.
Cuando las burlas cesaron por la llegada de su maestra Carrie ya no lloraba, estaba en su estado de catatonia repentina, la maestra la tomo de los hombros y le dio un par de sacudidas, mas esto no sirvió de nada, después de lo ocurrido  fue cuando Christine estaba muerta...

Lo curiosos de todo esto era ¿Por que estaba recordando esto? ¿Por que así? lo otro que pensaba Carrie en ese instante. ¿Era cierto lo que su mente le mostraba? porque si era así era demasiado extraño que no tuviese recuerdo alguno si no hasta esa edad, era como si su mente quisiera defenderse o perturbarla de alguna manera, era demasiada casualidad como para dejarla pasar por alto ¿Debía pensar que todo era casualidad o era real lo que vivía?
Eso era más complejo que cualquier pensamiento, más que la misma muerte de aquel hombre bueno sincero y  honesto que le tendió su mano cuando más necesitaba ayuda.
Aquel pensamiento frió y punzante solo podía ser descrito como si en su cerebro hubiese partes vacías, parten en blanco y al llegar aquellos pensamientos, su mente se llenara como un vaso con agua hasta el punto de desbordarse.
Imágenes, sentimientos, emociones, todo era una oleada de información masiva, la cabeza le daba vueltas, sus manos taparon sus ojos en un intento de detener todo mas esto resulto imposible, Carrie intentaba negar la existencia de todos estos sucesos, pero resulto más que imposible hacer eso ya que en uno de esos fragmentos pudo ver a sus padres tan llenos de amor, con sus sonrisas expresivas demostrando que ella era lo mejor en el mundo, aquel rostro cálido, alegre, lleno de vida que solo los padres pueden mostrarnos.
Pero en ese mismo instante podía ver su rostro lleno de pánico en cuanto el avión caía, podía ver el rostro de su único y más grande amor pudo verlo muriendo bajo el esplendor de aquella luz misteriosa en medio de la noche.
Todo se hizo silencio, todo era oscuro, nadie estaba cerca, Carrie gritaba mas nadie podía oírla, vio sus recuerdos  pasando a derecha y a izquierda como los vagones de un tren en movimiento, eran rápidos pero se podían ver cada una de las vivencias de su tan corta pero extrema vida.

Cuando paso esto, al final pudo ver a su propio ser tendida en el suelo, mas ella se veía diferente, se veía a sí misma totalmente destrozada con la ropa  hecha harapos, su cabello hecho grumos de suciedad, sus labios hechos llagas como los de un leproso en su estado terminal, sus uñas negras casi carcomidas, y sus dientes o por lo menos los pocos que quedaban negrecidos....
Esta imagen tétrica hizo que Carrie diera unos pasos atrás para así sentir que estaba al borde de un abismo. Carrie cayó  en aquel abismo son fondo...

Abrió los ojos derrepente, estaba aun en el diván de Janeth ella no había llegado, eran ya las 12:00 Pm  ¿Que significaba ese sueño visión o lo que fuera?
Carrie en su intento de entender lo que ocurría se levanta y sale corriendo de aquel lugar, Janeth la ve salir sin razón alguna, Janeth corre tras ella, pero no puede alcanzarla, era algo extraño para ella ¿por que corrió y que paso?
Carrie corrió por mucho tiempo ¿cuanto fue? ¿Una hora tal vez dos?
Jamás lo podremos saber, peor en ese tiempo sus pies eran ligeros como el aire, sus pensamientos vagos y lejanos, cuando pudo reaccionar, solo pudo ver un solo sitio, el puente, aquel puente negro enorme que divida un río enfurecido, aquel puente donde el amor de su vida había muerto por aquel resplandor enorme  casi celestial.
Carrie camino casi como lo haría un muerto en vida, hasta aquel lugar, sus ojos estaban perdidos en un mar de preguntas, de sus ojos brotaban las lagrimas de la impotencia, no sabía que camino tomar, se sentó sobre una de las vigas de acero. en ese momento su mente vuela de nuevo hacia el vació, pudo verse a sí misma de nuevo como la mujer pordiosera que se había convertido, al mirar a su lado vio a otra Carrie ella era diferente, ella se veía bien vestida con una sonrisa y a su lado las personas que la habían amado.

¿Era esto una señal? ¿Debía tomar uno de esos caminos? ella en su momento no lo sabía pero en su corazón lo tenía claro, tan claro como el agua misma, esa misma agua que se había desbordado en su mente al tener tanta información sobre sus visiones monstruosas...
En ese momento Janeth quien pudo seguir el rastro de Carrie la ve en aquel lugar como si estuviese lista para saltar, ella corre tras Carrie, pero cada paso que daba pareciera que la alejara mas, incluso podría pensarse que fue así...
Eso tampoco jamás lo sabremos,  tras aquellos pensamientos roídos y carcomidos por su desespero, Carrie toma la decisión mas difícil de su vida, sabe que no puede deshacer una maldición por que no sabe ni quien fue capaz de hacer algo así, su única salida es ser feliz en la eternidad con sus seres amados. Si es que existe algo como "El más allá" Carrie  se levanta, extiende sus brazos, y como si nada mas importara salta hacia el río.
Janeth grita en su desespero, corre con más prisa que nunca pero es demasiado tarde, la velocidad del rió y la fuerza de sus rápidos no dejaron ni rastros de aquella chica...
Esta es la historia de Carrie Anson.
Quien el final de su vida pudo entender que hay algunos demonios que no pueden ser enfrentados en vida si no en muerte.
Lo sé porque soy yo quien escribo su historia, soy su amiga, su confidente, su psiquiatra Janeth Rust, era la única mujer que podía ayudarla, eso lo sé porque mi verdadero nombre es Sahara Frattini...

domingo, 3 de mayo de 2020

Lo Que El Covid Se Llevo

Es curioso, escribir sobre este tipo de cosas, cuando nadie se lo esperaba. A decir verdad yo tampoco lo esperaba, aunque como escritor (así sea solo de nombre) pensaba en un futuro apocalíptico proveniente de una pandemia. Cuando la noticia salto en las redes sociales, pensé que era una farsa, algo con lo que los cibernautas podrían generar un poco de pánico en las mentes mas débiles. Como reza un dicho, Internet es un caldo de chismes, noticias falsas y de enfermos... Al pasar los días, nadie sospechaba lo que ocurriría. Pasamos un mes decembrino. Algunos con alegrías, otros con dolores y llanto. La víspera del año 2020 traería consigo aquella desgracia. Aquel escenario apocalíptico que pensé. Las noticias anunciaban que la pandemia del Covid-19 estaba en varias partes del mundo. Mi rostro estupefacto, mi mandíbula caída, y una expresión que para ser sincero no podría decir otra cosa sino "no sea hijueputa, ¿enserio?" Sabia que dicho virus no tardaría en llegar aquí. Mientras en la farmacia de mis padres pensaba miles de cosas, en la mente de mi esposa rondaba una "Mi bebe" Al llegar a casa, hablamos i miramos opciones. Yo sabia bien que en poco tiempo estaríamos como en Wuhan. Aislados en una cuarentena que no sabríamos cuanto tiempo tardaría y si era efectiva frente a este nuevo virus. Aunque muchos saben la historia, por que la han vivido en carne propia. Mi idea no es llenarlos de palabras sin sentido por parte de este humilde escritor de solo nombre. Mi idea es llegar al corazón de cada uno de ustedes, que sepan que hay cosas fuera de nuestro alcance. Escribir algo con que pueden entretenerse esta tarde, o esta noche antes de ir a dormir. Cuento desde mis ojos, la vivencia en medio de una pandemia. Con una esposa de 8 meses de embarazo, en una casa prácticamente solos, en uno de los lugares con mayor foco de contagio en la ciudad. Les cuento el día a día, el como pude ver la idiotez al juzgar a una persona por una imagen sin sentido, ver gente sin algún pensamiento de raciocinio, al salir a la calle con un tapabocas en la garganta. O usándolo como gorra o carpa para piojos. Sentir la desesperación, el miedo por tu familia lejana, la cual se debe exponer a personas sin saber si tienen tal virus o no. El como puedes sobrevivir con los ahorros que tenia destinado a otras cosas. Como en caso particular, la cuna de mi hijo, algunos gustos personales, como comprar el ultimo libro de Alvaro Vanegas, de Stephen King. Incluso poder comprarle algo a mi esposa a su gusto. Con esto no quiero tampoco inspirar tristeza o pedir cosas, para fortuna de nosotros, gracias a Dios (por cierto no me avergüenza decir que creo en el) tenemos todo lo necesario para estar aquí un tiempo mas, como dije, solo espero poder entretener con este texto. Eso si, con faltas de ortógrafa monumentales¡¡ Pero, es lo que hay chicos y chicas... Estar aquí encerrado es un momento de alegría, mi esposa, mi bebe no nato y una gata de 4 meses, llamada "luna" me han dado paz, angustias, risas, me han dado calor de hogar. Una paz que a decir verdad hace muchísimo tiempo no sentía. Desveladas por causa de los dolores de mi esposa, sentir a nuestro bebe moviéndose cuando ponemos un buen rock clásico por el televisor. Abrazarla en sus momentos de ansiedad, a causa del encierro. Y, es que el pánico al igual que el desespero se apodera de todos de cuando en cuando, mas cuando te llegan las noticias de todos los sitios red, cuando ves el pánico de la gente que no sabe que hacer porque no encuentra víveres, porque dicen que hay escasees de medicamentos, insumos y alimentos. Esos momentos pueden hacer temblar a toda una nación. Ver eso a través de una pantalla te hace pensar ¿Este es el fin? pero pese a eso, muchas personas se encuentran resguardados en su casa, otros tantos exponiendo sus vidas. Amigo, amigas. Lo que el Covid se llevo, han sido vidas, ilusiones, esperanzas, nos ha recordado lo vulnerables que somos. Que no somos inmortales, al contrario. Basto una pandemia para frenar muchas ciudades, mucha de la economía. Y por el contrario trajo consigo, miedo, incoherencias, mitos y nuevas teorías de conspiración. La importancia de la familia, la importancia del mundo y del porqué debemos cuidarlo. Ha reunido familias entras, nos ha dado una basta experiencia. No se esto cuando terminara, no se si todo volverá a ser igual, solo puedo agradecerte por detenerte por leer los desvaríos de un escritor de nombre. Te pido que seas valiente, que reúnas las fuerzas para seguir, que cuando esto termine podamos hablar, tomarnos algo o simplemente saludarnos Pero nada mas te pido que te ciudades, cuides a los demás y cuides el lugar donde vivimos. Que no tomes esto como burla, como sermón. Tómalo como un consejo o como algo de entretención como dije al principio. Ten un hermoso día, cuídate y nos veremos pronto. A todos esos médicos, transportadores, trabajadores independientes, farmaceutas, policías y demás personas que salen a trabajar día a día. Les doy gracias, por cuidar de cada uno de nosotros. Animo¡¡ saldremos de esta.

jueves, 15 de agosto de 2019

#JuvesDeMicrocuentos

Cada mañana Andrés, un fisicoculturista en ascenso tomaba un desayuno poco usual. Una mezcla de anabólicos, esteroides y una buena dosis mensual de Nebido.
Hacía ejercicio más haya de lo debido, para luego tomar un baño refrescante en su bañera.

Un día en particular, se acercaba una competencia, el era el favorito a ganar.
Robert su representante, era quien cuidaba de Andrés, lo que menos quería era que muriera por culpa de sus cocteles diarios de testosterona.
Más ése día había algo diferente en el aire. Trás hacer sus ejercicios diarios, Andrés se dirige a su bañera. Rejala su cuerpo, decide dormir un poco.
Los minutos pasaron, debía estar listo para ir al gimnasio. Su celular suena, Robert está molesto, Andrés se levanta a toda prisa. El jabón que cubría su cuerpo cumple su función haciéndo que se resbalará. El golpe que sonó en seco alertó a Robert, grito y escuchó para ver qué había pasado. El silencio tomó protagonismo, el miedo el papel principal. Robert corrió a la casa de Andrés, al entrar al baño vió que Andrés. No estaba muerto, pero el golpe había causado una lesión la cuál dejó a Andrés cuadraplejico.

domingo, 11 de agosto de 2019

#HistoriasParaNoDormir

Los golpes provenían de un lugar cercano.
Eran cómo si alguien tocará una ventana. Pero, aquella queda a mi derecha. El ruido proviene del lado izquierdo de mi cuarto.

Son las 2:30am fué ése ruido el que me despertó. Aún con mis ojos casi cerrados, observé con curiosidad.
Aún no creo lo que pasó, encendí mi celular, dirijo la brillante luz hacia el tocador de mi recámara, una mano me saluda desde ese sitio, un rostro sonriente se asoma casi enseguida.

Era mi rostros, era mi sonrisa, era otro yo.  El miedo me paralizó, cai en un sueño profundo.
Al despertar a la mañana siguiente, noté como el cristal estaba desgastado, se había formado un orificio en el espejo.

Tengo miedo, de pensar que aquél ser idéntico a mi. Pueda estar está noche a mi lado, esperándo a encerrarme a mi en el espejo.

miércoles, 10 de julio de 2019

El Pactó

Debemos hacer un pequeño paréntesis antes de empezar con está historia.

En los tiempos antiguos era más fácil escuchar, con ésto me refiero a que todo él mundo era más silencioso. Todo era más pacífico, por tanto, era más fácil escuchar la voz de Dios o del demonio.

Y es precisamente de lo qué trata está historia. En Génova, Italia. Nació un talentoso niño.
Fué conciderado como uno de los más virtuosos compositores musicales de su época.
Violinista, guitarrista, compositor. Ésos Fueron sus mayores logros.

Pero no sería por ésto qué sería reconocido en todo el mundo. Los años pasarían, su técnica, sus notas, su edad, su edad seguían en crecimiento. Aquellas notas sublimes alegraban a la gente, su música era preciosa dulce para todos los oídos.
Se decía que cada vez que entonaban su melodía los ángeles quedaban encantados.

Una noche, en medio de su plácido sueño, pasada la medianoche una extraña sombra invade el cuarto. Toma un banquillo dónde esté músico solía tocar todo el día, se sienta y observa al músico, Él despierta.
Asombrado, no podía creer que una figura cómo ésa esté frente a él. Mucho más de enterase qué dichas criaturas existían entré nosotros.
Intenta pronunciar palabra más le resulta imposible. El demonio simplemente señaló a su odió, dandole a entender que no debía hablar, sólo escuchar.
De la nada, un par de llamaradas salen de las manos del demonio, mostrando un violín. Esté lo empezó a tocar.

Aquella melodía, hizo qué esté hombre cayera en una hipnosis, la cuál lo llevo a diferentes lugares.
Se vió a sí mismo en hermosos prados de campos elíseos, se vió en lo más alto de las montañas. Estás eran tan altas qué casi podía tocar el cielo y las estrellas.
Se sentía tan ligero cómo una pluma, tan insignificante cómo una oruga en medio del bosque.

Una vez terminado, aquél demonio tomó el violín, lo entrego a esté músico. Lo observó y sé fué en medio de la noche sin pronunciar palabra alguna.
El músico observó aquél instrumento, era de color rojo, estaba hecho con él mejor cedro, el arco era de color negro, hecho con el mejor pelo de caballo. Sus cuerdas doradas, tan finas qué nadie pensó fuesen de esté mundo.

Puede que el demonio no se lo haya dicho, pero sabemos qué es así " mientras tenga ése violín nadie podría llegar a ser tan grande cómo él"
Lo qué tal vez no sabía, era qué cada nota tocada con esté instrumento haría qué su vida se agote.
Ésto sería para asegurar que el día de su muerte, tuviese un lugar asegurado en el infierno. Así podría alegrar los días para Lucifer

Así cómo él alegró los días de Dios, así un mortal alegraría los días del padre de las mentiras.
Aquél hombre, intentó recrear la dulce sonata, más le resultó imposible. Pese a qué su versión fuese exitosa, no llegaba a ser esa sublime y plácida melodía, escuchada en medio de la noche, a manos de un demonio. Así fué cómo lo intento por varios años hasta el día de su descenso. El 27 de mayo de 1840 a causa de una extraña tuberculosis.

Aunque lo extraño aparté dé su muerte. Es qué su violín rojo de arco negro y cuerdas doradas jamás fué encontrado.
Y sí aún no reconoces al personaje atraves de está historia. Déjame refrescarte un poco la memoria...

Niccolo paganini. Más conocido cómo él violinista demoníaco.

miércoles, 3 de julio de 2019

En mí hora más oscura

-Que tarde más fría y solitaria-

decía una joven camarera de la panadería

 " El Edén" 

Aquella voz era suave, algo r confortante, era por eso que la visitaba casi a diario. Aquella voz me alejaba de mis problemas, de los demonios que consumían mi alma día trás día.


Entraba por cuatro razones en realidad, una los cigarrillos, claro. Cuándo éstos se me terminaban, por el tinto, aunque casi siempre amargo era barato.

Debo aclarar, no soy un hombre adinerado, tampoco pobre. Solo soy alguien que ve pasar la vida sin ningún afán, que le resta de cero a nada, nada ese "significado" de la "vida" 

Acumular bienes, acumular dinero, me parece una idea tan absurda y ridícula como la idea de los "ateos" cuando dicen que los demonios o ángeles no existen.


Por último, por un famoso lema que existe entre los abogados chupa sangre. 

"Los mejores negocios se cuadran en la panadería"

Algo así es lo que me hacé venir día a día. No, no soy uno de esos tinterillos chupa sangre, mi ofició es algo más religioso, algo más oscuro y siniestro. Me dedicó a ser exorcista...

Si leíste bien, soy un exorcista y no como los del Vaticano con sotanas y las biblias bajó el brazo, leyendo un par de salmos gritando

 " in nomine patris et filii et spiritus sancti "

Preguntando nombres de demonios y su propósito con ese cuerpo.

Cómo tampoco soy una versión pirata de John Constantine a toda hora fumando y hablando con ángeles. Todo eso me produce cierta gracia,